A 3 meses de Gobierno (Segunda entrega)
15 de Nov, 2022
Juan Guillermo Hernández Lombo -@JHernandezLombo
En la columna de la semana anterior empezamos el análisis de los primeros 100 días de gobierno de Gustavo Petro y Francia Márquez como mandatarios del país y en ella hicimos un balance de su equipo de gobierno.
Sobre lo dicho, es importante resaltar un elemento que olvidé mencionar en aquella columna. El carácter paritario y diverso de quienes integran el equipo de gobierno en el primer nivel, pues representantes de diversos grupos poblacionales hoy lideran distintos sectores; Hombres y mujeres, negros, indígenas, jóvenes, académicos, políticos, deportistas, entre muchos otros, son la cara del gobierno y actúan como responsables en diversas áreas de la institucionalidad estatal.
Ocho días después de la anterior columna, son varias las firmas encuestadoras que a nivel nacional han publicado mediciones sobre la evaluación de la gestión del actual gobierno en estos primeros 100 dias de gobierno. A las mediciones de la firma Cifras & Conceptos, se sumaron las del Centro Nacional de Consultoría e INVAMER, y en todas, los resultados son similares: la confianza, aprobación e imagen favorables del Presidente y su Vicepresidenta se mantienen aún en los más altos niveles.
Evaluamos en esa primera columna a los Ministros que integran el Gabinete, ahora en esta nueva entrega, destacaremos algunos de los denominados Quick Wins -victorias tempranas- que son precisamente aquellas acciones que, dentro de un proyecto a largo plazo, pueden implementarse rápidamente bien sea por tener una menor complejidad y por tanto una aplicación práctica, ó sencillamente por constituir aquel grupo de acciones estratégicas a las que se les impone un mayor énfasis y se logran avances de manera expedita.
Se ha dicho que las victorias tempranas le sirven a todo proyecto entre otros aspectos, para darle continuidad a determinados ejes de acción; ser una gran oportunidad para lograr nuevos y mayores apoyos económicos por parte de otros actores, generando incluso nuevos aliados; y para aumentar la credibilidad del proyecto en si mismo.
Pues bien, teniendo en cuenta la importancia de estos logros a corto plazo para cualquier proyecto de gobierno, destacaré entonces algunos de ellos, los que -en nuestro criterio- reflejan el carácter del nuevo gobierno y permiten dilucidar los principales temas de la agenda a desarrollar en el próximo cuatrienio.
Uno de los sectores más sentidos en nuestro país es el agrario, y es él el actual gobierno parece haber fijado una mirada especial.
Cinco pueden ser las más grandes e importantes victorias; la primera de ellas tiene que ver con el acuerdo logrado con los latifundistas del país agremiados en FEDEGAN para la compra cerca de tres millones de hectáreas de sus tierras, para ser justamente otorgadas a familias campesinas sin tierra de todo el país. Un avance definitivo en el logro de la anhelada reforma rural integral esperada por décadas por nuestro campesinado. A este anuncio ya se empiezan a sumar latifundistas de otros gremios, como los palmeros y otros agricultores agremiados en la Sociedad de Agricultores de Colombia (SAC) quienes han dado muestras de sumarse a esta iniciativa y también ofertar sus tierras. Sin duda, son anuncios esperanzadores para el logro del primer punto del acuerdo de Paz de 2016 suscrito con las extintas FARC y que busca beneficiar a las comunidades rurales más golpeadas por el conflicto armado en el país.
Un segundo logro en esta misma línea, tiene que ver con los avances en estos primeros 100 días, en relación con la titulación masiva de cerca de 681.372 hectáreas (11.200 títulos) en 19 departamentos, para 10.800 famílias indígenas, campesinas y afro; Una cifra a la cual debe sumarse la presentación por parte de la Unidad de Restitución de Tierras, de nueve demandas para recuperar más de 65.000 hectáreas adicionales, a favor de 26.000 sujetos de reparación integrantes de comunidades indígenas y afro-descendientes de los departamentos de Cauca y Putumayo.
El tercero y no menos importante avance del gobierno nacional, tiene que ver con la reactivación del denominado Fondo de Acceso a Insumos Agropecuarios que cubrirá 24 sectores agrícolas y pecuarios y con el que se buscará beneficiar a 120.000 pequeños productores agrícolas. Para este Fondo se destinaron alrededor de $80.000 millones con el fin de otorgar un reembolso de hasta el 20% de las compras de insumos para fertilizantes o alimento concentrado para animales que se efectuen entre el 17 de noviembre y el 31 de diciembre de este año, en alguno de los cerca de 10.000 establecimientos comerciales habilitados en todo el país para otorgar este beneficio.
En materia normativa existen dos grandes iniciativas de reforma a la Constitución que actualmente cursan en el Congreso de la República; la primera de ellas tiene que ver con el proyecto de Acto Legislativo, que crea la Jurisdicción Agraria y Rural y que incluye entre otras novedades la creación de una Corte rural, tribunal del mismo nivel de las Altas Cortes existentes actualmente, pero especializada en derecho agrario y al que se le encargaría el conocimiento y resolución de controversias en torno al derecho a la tierra. Y una segunda iniciativa busca reconocer a nuestros campesinos como sujetos de especial protección constitucional y su acceso a una vida digna en el campo. Este proyecto de reconocimiento de nuestros campesinos como sujeto de derechos, busca imponerle al Estado el deber de garantizar el ejercicio pleno de los derechos individuales y colectivos de la población campesina, entre ellos el acceso progresivo a la tierra de los trabajadores agrarios, la educación, salud, vivienda, seguridad social, recreación, crédito, comunicaciones, comercialización de los productos, asistencia técnica y empresarial, con el fin de mejorar su calidad de vida.
Y finalmente el ultimo de los logros a destacar en materia agraria, es la realización de la primera gran Convención Nacional Campesina para avanzar en la construcción de una agenda de trabajo que permita avanzar en los puntos más importantes de la denominada Reforma Agraria Integral, este seria el escenario asambleario más importante del campesinado en Colombia en los últimos años, después del declive y marchitamiento del movimiento campesino congregado en la Asociación Nacional de Usuarios Campesinos -ANUC- hacia la década de los años 70´s.
De esta forma, la búsqueda y logro de la esquiva Reforma Rural Integral para el país, se avizora como uno de los principales temas de la agenda del actual gobierno para los próximos cuatro años; importantes logros éstos, sobre los cuales se han planteado interesantes interrogantes en relación con los tiempos y mecanismos para hacerlos realidad. A grandes expectativas generadas, son enormes los retos planteados.
En la columna de la semana anterior empezamos el análisis de los primeros 100 días de gobierno de Gustavo Petro y Francia Márquez como mandatarios del país y en ella hicimos un balance de su equipo de gobierno.
Sobre lo dicho, es importante resaltar un elemento que olvidé mencionar en aquella columna. El carácter paritario y diverso de quienes integran el equipo de gobierno en el primer nivel, pues representantes de diversos grupos poblacionales hoy lideran distintos sectores; Hombres y mujeres, negros, indígenas, jóvenes, académicos, políticos, deportistas, entre muchos otros, son la cara del gobierno y actúan como responsables en diversas áreas de la institucionalidad estatal.
Ocho días después de la anterior columna, son varias las firmas encuestadoras que a nivel nacional han publicado mediciones sobre la evaluación de la gestión del actual gobierno en estos primeros 100 dias de gobierno. A las mediciones de la firma Cifras & Conceptos, se sumaron las del Centro Nacional de Consultoría e INVAMER, y en todas, los resultados son similares: la confianza, aprobación e imagen favorables del Presidente y su Vicepresidenta se mantienen aún en los más altos niveles.
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Evaluamos en esa primera columna a los Ministros que integran el Gabinete, ahora en esta nueva entrega, destacaremos algunos de los denominados Quick Wins -victorias tempranas- que son precisamente aquellas acciones que, dentro de un proyecto a largo plazo, pueden implementarse rápidamente bien sea por tener una menor complejidad y por tanto una aplicación práctica, ó sencillamente por constituir aquel grupo de acciones estratégicas a las que se les impone un mayor énfasis y se logran avances de manera expedita.
Se ha dicho que las victorias tempranas le sirven a todo proyecto entre otros aspectos, para darle continuidad a determinados ejes de acción; ser una gran oportunidad para lograr nuevos y mayores apoyos económicos por parte de otros actores, generando incluso nuevos aliados; y para aumentar la credibilidad del proyecto en si mismo.
Pues bien, teniendo en cuenta la importancia de estos logros a corto plazo para cualquier proyecto de gobierno, destacaré entonces algunos de ellos, los que -en nuestro criterio- reflejan el carácter del nuevo gobierno y permiten dilucidar los principales temas de la agenda a desarrollar en el próximo cuatrienio.
Uno de los sectores más sentidos en nuestro país es el agrario, y es él el actual gobierno parece haber fijado una mirada especial.
Cinco pueden ser las más grandes e importantes victorias; la primera de ellas tiene que ver con el acuerdo logrado con los latifundistas del país agremiados en FEDEGAN para la compra cerca de tres millones de hectáreas de sus tierras, para ser justamente otorgadas a familias campesinas sin tierra de todo el país. Un avance definitivo en el logro de la anhelada reforma rural integral esperada por décadas por nuestro campesinado. A este anuncio ya se empiezan a sumar latifundistas de otros gremios, como los palmeros y otros agricultores agremiados en la Sociedad de Agricultores de Colombia (SAC) quienes han dado muestras de sumarse a esta iniciativa y también ofertar sus tierras. Sin duda, son anuncios esperanzadores para el logro del primer punto del acuerdo de Paz de 2016 suscrito con las extintas FARC y que busca beneficiar a las comunidades rurales más golpeadas por el conflicto armado en el país.
Un segundo logro en esta misma línea, tiene que ver con los avances en estos primeros 100 días, en relación con la titulación masiva de cerca de 681.372 hectáreas (11.200 títulos) en 19 departamentos, para 10.800 famílias indígenas, campesinas y afro; Una cifra a la cual debe sumarse la presentación por parte de la Unidad de Restitución de Tierras, de nueve demandas para recuperar más de 65.000 hectáreas adicionales, a favor de 26.000 sujetos de reparación integrantes de comunidades indígenas y afro-descendientes de los departamentos de Cauca y Putumayo.
El tercero y no menos importante avance del gobierno nacional, tiene que ver con la reactivación del denominado Fondo de Acceso a Insumos Agropecuarios que cubrirá 24 sectores agrícolas y pecuarios y con el que se buscará beneficiar a 120.000 pequeños productores agrícolas. Para este Fondo se destinaron alrededor de $80.000 millones con el fin de otorgar un reembolso de hasta el 20% de las compras de insumos para fertilizantes o alimento concentrado para animales que se efectuen entre el 17 de noviembre y el 31 de diciembre de este año, en alguno de los cerca de 10.000 establecimientos comerciales habilitados en todo el país para otorgar este beneficio.
En materia normativa existen dos grandes iniciativas de reforma a la Constitución que actualmente cursan en el Congreso de la República; la primera de ellas tiene que ver con el proyecto de Acto Legislativo, que crea la Jurisdicción Agraria y Rural y que incluye entre otras novedades la creación de una Corte rural, tribunal del mismo nivel de las Altas Cortes existentes actualmente, pero especializada en derecho agrario y al que se le encargaría el conocimiento y resolución de controversias en torno al derecho a la tierra. Y una segunda iniciativa busca reconocer a nuestros campesinos como sujetos de especial protección constitucional y su acceso a una vida digna en el campo. Este proyecto de reconocimiento de nuestros campesinos como sujeto de derechos, busca imponerle al Estado el deber de garantizar el ejercicio pleno de los derechos individuales y colectivos de la población campesina, entre ellos el acceso progresivo a la tierra de los trabajadores agrarios, la educación, salud, vivienda, seguridad social, recreación, crédito, comunicaciones, comercialización de los productos, asistencia técnica y empresarial, con el fin de mejorar su calidad de vida.
Y finalmente el ultimo de los logros a destacar en materia agraria, es la realización de la primera gran Convención Nacional Campesina para avanzar en la construcción de una agenda de trabajo que permita avanzar en los puntos más importantes de la denominada Reforma Agraria Integral, este seria el escenario asambleario más importante del campesinado en Colombia en los últimos años, después del declive y marchitamiento del movimiento campesino congregado en la Asociación Nacional de Usuarios Campesinos -ANUC- hacia la década de los años 70´s.
De esta forma, la búsqueda y logro de la esquiva Reforma Rural Integral para el país, se avizora como uno de los principales temas de la agenda del actual gobierno para los próximos cuatro años; importantes logros éstos, sobre los cuales se han planteado interesantes interrogantes en relación con los tiempos y mecanismos para hacerlos realidad. A grandes expectativas generadas, son enormes los retos planteados.
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¿Petro inteligente o ignorante?
27 de Jan, 2025
Por: Carlos Enrique Martinez Caballero, columnista invitado Tolima7dias.com.co
Advertencia: los comentarios escritos a continuación son responsabilidad única y exclusiva de su autor, y en nada compromete a este medio de comunicación digital
Los colombianos estarán divididos en sus posturas para calificar a Gustavo Petro bajo la pregunta: ¿inteligente o ignorante? Sus seguidores, los once millones que votaron por él, posiblemente dirán que es brillante, pero los cuarenta millones restantes creo que considerarán que es un bruto o ignorante.
Podrían decir que es inteligente, toda vez que su postura como gobernante en las redes sociales hacia los Estados Unidos desaprobando el ingreso de los aviones y los connacionales, desvió la atención y el ruido constante en los últimos días que le generaba la incontrolable situación del Catatumbo, los fallidos diálogos con el ELN, el desplazamiento masivo en Norte de Santander como resultado de los enfrentamientos entre el ELN y las FARC, además de la reunión entre los ministros de defensa de Colombia y Venezuela, el aumento de la gasolina y el tema de la conmoción interior.
Aprovechó para nombrar a uno de sus guardianes pretorianos, que es Laura Sarabia, como Canciller de Colombia, posicionándola aún más en el gobierno y dándole vía libre frente a la comunidad internacional, permitiéndole hacer “lobby” y multiplicar sus ideas e intenciones, sin importarle los cuestionamientos, críticas e investigaciones vigentes que ella tiene.
De paso Petro logró dos cosas: fortalecerse entre sus seguidores utilizando a Colombia, USA y los repatriados como puente de lanzamiento para ser noticia en todo el mundo, uniéndose al discurso antiimperialista y ganar adeptos del mundo que se identifican con las ideas socialistas, revolucionarias y comunistas.
Pero también revivir la posibilidad de una reelección frente a sus once millones de seguidores en votos, que ya están trabajando para que continúe en el poder o colocar a uno de sus peones en el 2026.
Por su parte, otros lo considerarán un bruto o ignorante, al poder en riesgo otra vez la estabilidad del país, no solo en el tema de la supuesta “paz total” que no llegará por el tema de la inseguridad, sino también por lo económico y social; eso por tratar de mostrarle los dientes a la primera potencia del mundo en un momento totalmente innecesario.
Él, como presidente y su gobierno, ya habían aceptado con el gobierno saliente de los Estados Unidos más de dieciséis mil repatriados en los mismos aviones y con las mismas características diplomáticas manifiestas, lo que significa que el tema no era del Estado colombiano, sino una postura personal del presidente Gustavo Petro.
Quien, a la llegada al poder, desestabilizó la economía y el dólar dio un golpe tremendo al país; la inversión extranjera descendió y los indicadores mostraron inestabilidad. Ahora, con esta acción, nuevamente, por una ignorancia bien administrada, se pone en vilo una temática que afecta a los colombianos y que se creía superada.
Es estúpido no medir las consecuencias de sus actos y más de su parte, el que es guerrillero, senador, político ahora presidente y “economista”. Sus actos afectan más al pueblo que a él mismo o al gobierno; afectan la imagen de Colombia, a todos los que lo eligieron pensando que administraría bien el país, afecta a los empresarios y a los mismos colombianos que están radicados en los Estados Unidos. Para todo aquel que no entienda, Petro ya ganó todo y va por más. La pregunta sería: ¿Quién pierde con sus posturas incontrolables de medianoche?
A este conjunto de problemas se le debe agregar otra cosa, la seguridad; el principal aliado de Colombia en esta materia no es Venezuela, son los Estados Unidos, y cualquier restricción o desequilibrio afecta a todo el país, tema que ya surte efectos por falta de una política clara del gobierno, el rompimiento de relaciones con Israel y todo el fortalecimiento que no tiene la Fuerza Pública, tanto en materia de capacitación, intercambio de experiencia y recibo de recursos que mucha falta hace.
Para aquellos que deseen una explicación resumida, el ignorante de Petro actúa más por sus intenciones revolucionarias que por el pueblo de Colombia, arriesgando el todo por el todo de manera inteligente para mantenerse en el poder y seguir con las ideas donde inició su vida pública en el M19, pretendiendo posicionar e implantar el socialismo revolucionario y terrorista. Si esto no es terrorismo, entonces ¿qué es? Terrorismo: es todo aquello que cause intimidación o coerción de poblaciones.
“El camino puede ser difícil, pero con tu ayuda lo podemos lograr”. “Soy ciudadano”.
Carlos Enrique Martínez Caballero
Tolima7dias.com.co Sabe lo que dice
Advertencia: los comentarios escritos a continuación son responsabilidad única y exclusiva de su autor, y en nada compromete a este medio de comunicación digital
Los colombianos estarán divididos en sus posturas para calificar a Gustavo Petro bajo la pregunta: ¿inteligente o ignorante? Sus seguidores, los once millones que votaron por él, posiblemente dirán que es brillante, pero los cuarenta millones restantes creo que considerarán que es un bruto o ignorante.
Podrían decir que es inteligente, toda vez que su postura como gobernante en las redes sociales hacia los Estados Unidos desaprobando el ingreso de los aviones y los connacionales, desvió la atención y el ruido constante en los últimos días que le generaba la incontrolable situación del Catatumbo, los fallidos diálogos con el ELN, el desplazamiento masivo en Norte de Santander como resultado de los enfrentamientos entre el ELN y las FARC, además de la reunión entre los ministros de defensa de Colombia y Venezuela, el aumento de la gasolina y el tema de la conmoción interior.
Aprovechó para nombrar a uno de sus guardianes pretorianos, que es Laura Sarabia, como Canciller de Colombia, posicionándola aún más en el gobierno y dándole vía libre frente a la comunidad internacional, permitiéndole hacer “lobby” y multiplicar sus ideas e intenciones, sin importarle los cuestionamientos, críticas e investigaciones vigentes que ella tiene.
De paso Petro logró dos cosas: fortalecerse entre sus seguidores utilizando a Colombia, USA y los repatriados como puente de lanzamiento para ser noticia en todo el mundo, uniéndose al discurso antiimperialista y ganar adeptos del mundo que se identifican con las ideas socialistas, revolucionarias y comunistas.
Pero también revivir la posibilidad de una reelección frente a sus once millones de seguidores en votos, que ya están trabajando para que continúe en el poder o colocar a uno de sus peones en el 2026.
Por su parte, otros lo considerarán un bruto o ignorante, al poder en riesgo otra vez la estabilidad del país, no solo en el tema de la supuesta “paz total” que no llegará por el tema de la inseguridad, sino también por lo económico y social; eso por tratar de mostrarle los dientes a la primera potencia del mundo en un momento totalmente innecesario.
Él, como presidente y su gobierno, ya habían aceptado con el gobierno saliente de los Estados Unidos más de dieciséis mil repatriados en los mismos aviones y con las mismas características diplomáticas manifiestas, lo que significa que el tema no era del Estado colombiano, sino una postura personal del presidente Gustavo Petro.
Quien, a la llegada al poder, desestabilizó la economía y el dólar dio un golpe tremendo al país; la inversión extranjera descendió y los indicadores mostraron inestabilidad. Ahora, con esta acción, nuevamente, por una ignorancia bien administrada, se pone en vilo una temática que afecta a los colombianos y que se creía superada.
Es estúpido no medir las consecuencias de sus actos y más de su parte, el que es guerrillero, senador, político ahora presidente y “economista”. Sus actos afectan más al pueblo que a él mismo o al gobierno; afectan la imagen de Colombia, a todos los que lo eligieron pensando que administraría bien el país, afecta a los empresarios y a los mismos colombianos que están radicados en los Estados Unidos. Para todo aquel que no entienda, Petro ya ganó todo y va por más. La pregunta sería: ¿Quién pierde con sus posturas incontrolables de medianoche?
A este conjunto de problemas se le debe agregar otra cosa, la seguridad; el principal aliado de Colombia en esta materia no es Venezuela, son los Estados Unidos, y cualquier restricción o desequilibrio afecta a todo el país, tema que ya surte efectos por falta de una política clara del gobierno, el rompimiento de relaciones con Israel y todo el fortalecimiento que no tiene la Fuerza Pública, tanto en materia de capacitación, intercambio de experiencia y recibo de recursos que mucha falta hace.
Para aquellos que deseen una explicación resumida, el ignorante de Petro actúa más por sus intenciones revolucionarias que por el pueblo de Colombia, arriesgando el todo por el todo de manera inteligente para mantenerse en el poder y seguir con las ideas donde inició su vida pública en el M19, pretendiendo posicionar e implantar el socialismo revolucionario y terrorista. Si esto no es terrorismo, entonces ¿qué es? Terrorismo: es todo aquello que cause intimidación o coerción de poblaciones.
“El camino puede ser difícil, pero con tu ayuda lo podemos lograr”. “Soy ciudadano”.
Carlos Enrique Martínez Caballero
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