A 12 meses... (II parte)
21 de Oct, 2022
Por: Juan Guillermo Hernández Lombo @JHernandezLombo
En la anterior columna hice referencia al contexto político que enfrentarán los candidatos a los próximos comicios electorales a desarrollarse a nivel regional y local en el país el año entrante; y destacaba precisamente, la importancia y necesidad de ejercer realmente un voto programático, pues la realidad económica que se experimentará tanto en Colombia y en el mundo entero ha sido vaticinada como de enorme complejidad, requiriéndose de esta manera, unos mandatarios con enorme compromiso, capacidad y responsabilidad para asumir ese reto.
Es por ello que a 12 meses de celebrarse las mencionadas elecciones, resulta pertinente adentrarnos en el análisis de las precandidaturas que desde ya empiezan a salir a flote para integrar esta nueva contienda y que permiten empezar a vislumbrar los movimientos que en lo local y regional vienen dándose desde los diferentes sectores políticos.
Hablemos de la Alcaldía de Ibagué. Los últimos comicios (2019) se disputaron entre nueve candidatos, los cuales representaron a los diversos sectores políticos de la ciudad, hubo 2 candidatos representando a los sectores alternativos (Hugo Ernesto Zárrate- Alberto Girón); los sectores tradiciones cada uno contó con una candidatura, Liberales (Camilo Delgado), Conservadores (Andrés Fabián Hurtado), Centro Democrático (Leonidas López), el Partido de La U (José Barreto), los sectores cristianos también tuvieron su fórmula (Diana Gaitán), así como los denominados independientes quienes al igual que los sectores alternativos tuvieron dos candidaturas (Alfredo Bocanegra y Rubén Darío Correa). En general hubo candidatos para todos los gustos.
Este gran número de candidaturas generó una dispersión en la votación, lo cual, en términos de la mecánica electoral resulta favoreciendo a aquellas candidaturas que sin tener una fuerza significativa y con un mínimo caudal electoral, resultan ser las ganadoras, como en efecto ocurrió. El vencedor en esas elecciones (Andrés Fabián Hurtado) lo hizo con uno de los porcentajes de votación más bajos de toda la historia de las elecciones populares de alcaldes, alcanzando tan solo el respaldo del 22% de los Ibaguereños.
Hoy, se avizoran nuevamente un número importante de precandidaturas, alrededor de 15 nombres de todos los sectores y vertientes políticas han expresado su interés de buscar quedarse con una candidatura que dispute la alcaldía de la ciudad. Ex Concejales, Ex Congresistas, así como actuales Diputados y Concejales de la Ciudad integran ese enorme número de precandidatos.
Empecemos por las candidaturas de las maquinarias oficialistas, el denominado Clan Barreto. Este sector que respaldó y acompaño la elección del actual Alcalde Andrés Fabián Hurtado, llega dividido en al menos tres bloques; El bloque más cercano al actual Senador y Ex Gobernador Oscar Barreto tendría al menos tres nombres: Jorge Bolívar, Carlos Portela y Alexander Castro; un segundo bloque estaría en cabeza del también Senador Miguel Barreto, quién se la jugaría con el nombre de su hermano José Barreto; y un tercer y último bloque el que lideraría el actual Alcalde de la ciudad, desde donde se estaría respaldando el nombre de Johana Aranda.
Este grupo de precandidatos se destaca por que todos –salvo José Barreto- ocuparon altos cargos en los actuales gobiernos Municipal y Departamental como Secretarios de Despacho de diversas carteras, las cuales les sirvieron de trampolín para sus actuales candidaturas. De ellos, los de más experiencia electoral son Carlos Portela y Jorge Bolívar, quienes ya ocuparon curul en el Concejo de Ibagué y conocen bien la dinámica electoral de la ciudad.
Los candidatos del liberalismo. Los nombres con los que el Partido Liberal buscaría recuperar la Alcaldía de Ibagué y que hasta el momento son los que más suenan son los del Ex Concejal de Ibagué Camilo Delgado y el del César Picón Ex Secretario en la Alcaldía de Ibagué. De ellos, el mas experimentado en la lides electorales es Camilo Delgado, recordemos que jugó como candidato en las pasadas elecciones a la Alcaldía de Ibagué (2019), así como en las recientes elecciones al Congreso (2022) como candidato a la Cámara de Representantes, sin olvidar que antes de estos procesos venia siendo concejal por dos periodos consecutivos, es decir, en los últimos cuatro procesos electorales locales su nombre lo hemos encontrado en el tarjetón.
Las candidaturas del Uribismo. Nuevamente desde el uribismo intentarán jugar con candidatura propia a la Alcaldía de Ibagué, los Ex Representantes a la Cámara Pierre García y Ricardo Ferro serían los nombres que desde el Centro Democrático estarían buscando quedarse con la candidatura por este sector. Ellos, dos políticos con gran experiencia y de enorme cercanía al jefe máximo de esta colectividad Álvaro Uribe, , han sido ya rivales entre sí y conocen bien el sabor de las victorias y derrotas, pues ambos en su intento de reelegirse como Congresistas, fracasaron en sus intentos.
Los sectores alternativos. Entre los Alternativos también se evidencia una amalgama de candidaturas que reflejan los diversos sectores que integran este espectro de la política en la Ciudad; Un sector del Petrismo dentro del cual se encuentran el ex Alcalde de Ibagué Guillermo Alfonso Jaramillo y el ex Magistrado del Consejo Nacional Electoral Marco Emilio Hincapie, han propuesto el nombre del actual Diputado de la Asamblea del Tolima Marco Emilio Hincapié Jr. Por su parte los sectores sociales y ambientales, que recientemente eligieran como Representante a la Cámara a la profesora Martha Alfonso, anunciaron al también diputado Renzo García como su precandidato. Existen dos nombres adicionales que sin confirmarse, han dejado entrever que también buscarían disputarse la candidatura por este espectro político, ello son los actuales Concejales de Ibagué por el Partido Alianza Verde William Rosas y Linda Perdomo, sin embargo a ésta última dada su cercanía con la actual administración de la ciudad y con sectores del Barretismo la descartan no como precandidata en general a la Alcaldía, pero sí como precandidata de los sectores alternativos.
Y finalmente desde los sectores independientes han sonado los nombres de Rubén Darío Correa y de Camilo Ossa; sin embargo, la presencia del Ex concejal y también Ex candidato a la Alcaldía de Ibagué Rubén Darío Correa, quien fuera la revelación en las elecciones del año 2019 al alcanzar la segunda mas alta votación en aquel proceso electoral, se encuentra prácticamente descartada, dada su reciente renuncia al Concejo de la Ciudad y salida del país ante amenazas recibidas, al parecer por sus denuncias al interior del cabildo de la ciudad.
Sobre agendas de gobierno, prontuarios y demás detalles de esta contienda electoral se vendrán muchos debates, y seguramente serán mas columnas que dedicaremos para aportar en esas discusiones. Por ahora, nos resta seguir contando precandidatos.
En la anterior columna hice referencia al contexto político que enfrentarán los candidatos a los próximos comicios electorales a desarrollarse a nivel regional y local en el país el año entrante; y destacaba precisamente, la importancia y necesidad de ejercer realmente un voto programático, pues la realidad económica que se experimentará tanto en Colombia y en el mundo entero ha sido vaticinada como de enorme complejidad, requiriéndose de esta manera, unos mandatarios con enorme compromiso, capacidad y responsabilidad para asumir ese reto.
Es por ello que a 12 meses de celebrarse las mencionadas elecciones, resulta pertinente adentrarnos en el análisis de las precandidaturas que desde ya empiezan a salir a flote para integrar esta nueva contienda y que permiten empezar a vislumbrar los movimientos que en lo local y regional vienen dándose desde los diferentes sectores políticos.
Hablemos de la Alcaldía de Ibagué. Los últimos comicios (2019) se disputaron entre nueve candidatos, los cuales representaron a los diversos sectores políticos de la ciudad, hubo 2 candidatos representando a los sectores alternativos (Hugo Ernesto Zárrate- Alberto Girón); los sectores tradiciones cada uno contó con una candidatura, Liberales (Camilo Delgado), Conservadores (Andrés Fabián Hurtado), Centro Democrático (Leonidas López), el Partido de La U (José Barreto), los sectores cristianos también tuvieron su fórmula (Diana Gaitán), así como los denominados independientes quienes al igual que los sectores alternativos tuvieron dos candidaturas (Alfredo Bocanegra y Rubén Darío Correa). En general hubo candidatos para todos los gustos.
Este gran número de candidaturas generó una dispersión en la votación, lo cual, en términos de la mecánica electoral resulta favoreciendo a aquellas candidaturas que sin tener una fuerza significativa y con un mínimo caudal electoral, resultan ser las ganadoras, como en efecto ocurrió. El vencedor en esas elecciones (Andrés Fabián Hurtado) lo hizo con uno de los porcentajes de votación más bajos de toda la historia de las elecciones populares de alcaldes, alcanzando tan solo el respaldo del 22% de los Ibaguereños.
Hoy, se avizoran nuevamente un número importante de precandidaturas, alrededor de 15 nombres de todos los sectores y vertientes políticas han expresado su interés de buscar quedarse con una candidatura que dispute la alcaldía de la ciudad. Ex Concejales, Ex Congresistas, así como actuales Diputados y Concejales de la Ciudad integran ese enorme número de precandidatos.
Empecemos por las candidaturas de las maquinarias oficialistas, el denominado Clan Barreto. Este sector que respaldó y acompaño la elección del actual Alcalde Andrés Fabián Hurtado, llega dividido en al menos tres bloques; El bloque más cercano al actual Senador y Ex Gobernador Oscar Barreto tendría al menos tres nombres: Jorge Bolívar, Carlos Portela y Alexander Castro; un segundo bloque estaría en cabeza del también Senador Miguel Barreto, quién se la jugaría con el nombre de su hermano José Barreto; y un tercer y último bloque el que lideraría el actual Alcalde de la ciudad, desde donde se estaría respaldando el nombre de Johana Aranda.
Este grupo de precandidatos se destaca por que todos –salvo José Barreto- ocuparon altos cargos en los actuales gobiernos Municipal y Departamental como Secretarios de Despacho de diversas carteras, las cuales les sirvieron de trampolín para sus actuales candidaturas. De ellos, los de más experiencia electoral son Carlos Portela y Jorge Bolívar, quienes ya ocuparon curul en el Concejo de Ibagué y conocen bien la dinámica electoral de la ciudad.
Los candidatos del liberalismo. Los nombres con los que el Partido Liberal buscaría recuperar la Alcaldía de Ibagué y que hasta el momento son los que más suenan son los del Ex Concejal de Ibagué Camilo Delgado y el del César Picón Ex Secretario en la Alcaldía de Ibagué. De ellos, el mas experimentado en la lides electorales es Camilo Delgado, recordemos que jugó como candidato en las pasadas elecciones a la Alcaldía de Ibagué (2019), así como en las recientes elecciones al Congreso (2022) como candidato a la Cámara de Representantes, sin olvidar que antes de estos procesos venia siendo concejal por dos periodos consecutivos, es decir, en los últimos cuatro procesos electorales locales su nombre lo hemos encontrado en el tarjetón.
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Las candidaturas del Uribismo. Nuevamente desde el uribismo intentarán jugar con candidatura propia a la Alcaldía de Ibagué, los Ex Representantes a la Cámara Pierre García y Ricardo Ferro serían los nombres que desde el Centro Democrático estarían buscando quedarse con la candidatura por este sector. Ellos, dos políticos con gran experiencia y de enorme cercanía al jefe máximo de esta colectividad Álvaro Uribe, , han sido ya rivales entre sí y conocen bien el sabor de las victorias y derrotas, pues ambos en su intento de reelegirse como Congresistas, fracasaron en sus intentos.
Los sectores alternativos. Entre los Alternativos también se evidencia una amalgama de candidaturas que reflejan los diversos sectores que integran este espectro de la política en la Ciudad; Un sector del Petrismo dentro del cual se encuentran el ex Alcalde de Ibagué Guillermo Alfonso Jaramillo y el ex Magistrado del Consejo Nacional Electoral Marco Emilio Hincapie, han propuesto el nombre del actual Diputado de la Asamblea del Tolima Marco Emilio Hincapié Jr. Por su parte los sectores sociales y ambientales, que recientemente eligieran como Representante a la Cámara a la profesora Martha Alfonso, anunciaron al también diputado Renzo García como su precandidato. Existen dos nombres adicionales que sin confirmarse, han dejado entrever que también buscarían disputarse la candidatura por este espectro político, ello son los actuales Concejales de Ibagué por el Partido Alianza Verde William Rosas y Linda Perdomo, sin embargo a ésta última dada su cercanía con la actual administración de la ciudad y con sectores del Barretismo la descartan no como precandidata en general a la Alcaldía, pero sí como precandidata de los sectores alternativos.
Y finalmente desde los sectores independientes han sonado los nombres de Rubén Darío Correa y de Camilo Ossa; sin embargo, la presencia del Ex concejal y también Ex candidato a la Alcaldía de Ibagué Rubén Darío Correa, quien fuera la revelación en las elecciones del año 2019 al alcanzar la segunda mas alta votación en aquel proceso electoral, se encuentra prácticamente descartada, dada su reciente renuncia al Concejo de la Ciudad y salida del país ante amenazas recibidas, al parecer por sus denuncias al interior del cabildo de la ciudad.
La capital tolimense tiene hoy un censo electoral de 444.397 personas, distribuidas en 89 puestos de votación y 1.144 mesas, a las cuales en doce meses podrán acudir los ibaguereños por treceava oportunidad desde 1988 para elegir su alcalde local.
Sobre agendas de gobierno, prontuarios y demás detalles de esta contienda electoral se vendrán muchos debates, y seguramente serán mas columnas que dedicaremos para aportar en esas discusiones. Por ahora, nos resta seguir contando precandidatos.
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¿Petro inteligente o ignorante?
27 de Jan, 2025
Por: Carlos Enrique Martinez Caballero, columnista invitado Tolima7dias.com.co
Advertencia: los comentarios escritos a continuación son responsabilidad única y exclusiva de su autor, y en nada compromete a este medio de comunicación digital
Los colombianos estarán divididos en sus posturas para calificar a Gustavo Petro bajo la pregunta: ¿inteligente o ignorante? Sus seguidores, los once millones que votaron por él, posiblemente dirán que es brillante, pero los cuarenta millones restantes creo que considerarán que es un bruto o ignorante.
Podrían decir que es inteligente, toda vez que su postura como gobernante en las redes sociales hacia los Estados Unidos desaprobando el ingreso de los aviones y los connacionales, desvió la atención y el ruido constante en los últimos días que le generaba la incontrolable situación del Catatumbo, los fallidos diálogos con el ELN, el desplazamiento masivo en Norte de Santander como resultado de los enfrentamientos entre el ELN y las FARC, además de la reunión entre los ministros de defensa de Colombia y Venezuela, el aumento de la gasolina y el tema de la conmoción interior.
Aprovechó para nombrar a uno de sus guardianes pretorianos, que es Laura Sarabia, como Canciller de Colombia, posicionándola aún más en el gobierno y dándole vía libre frente a la comunidad internacional, permitiéndole hacer “lobby” y multiplicar sus ideas e intenciones, sin importarle los cuestionamientos, críticas e investigaciones vigentes que ella tiene.
De paso Petro logró dos cosas: fortalecerse entre sus seguidores utilizando a Colombia, USA y los repatriados como puente de lanzamiento para ser noticia en todo el mundo, uniéndose al discurso antiimperialista y ganar adeptos del mundo que se identifican con las ideas socialistas, revolucionarias y comunistas.
Pero también revivir la posibilidad de una reelección frente a sus once millones de seguidores en votos, que ya están trabajando para que continúe en el poder o colocar a uno de sus peones en el 2026.
Por su parte, otros lo considerarán un bruto o ignorante, al poder en riesgo otra vez la estabilidad del país, no solo en el tema de la supuesta “paz total” que no llegará por el tema de la inseguridad, sino también por lo económico y social; eso por tratar de mostrarle los dientes a la primera potencia del mundo en un momento totalmente innecesario.
Él, como presidente y su gobierno, ya habían aceptado con el gobierno saliente de los Estados Unidos más de dieciséis mil repatriados en los mismos aviones y con las mismas características diplomáticas manifiestas, lo que significa que el tema no era del Estado colombiano, sino una postura personal del presidente Gustavo Petro.
Quien, a la llegada al poder, desestabilizó la economía y el dólar dio un golpe tremendo al país; la inversión extranjera descendió y los indicadores mostraron inestabilidad. Ahora, con esta acción, nuevamente, por una ignorancia bien administrada, se pone en vilo una temática que afecta a los colombianos y que se creía superada.
Es estúpido no medir las consecuencias de sus actos y más de su parte, el que es guerrillero, senador, político ahora presidente y “economista”. Sus actos afectan más al pueblo que a él mismo o al gobierno; afectan la imagen de Colombia, a todos los que lo eligieron pensando que administraría bien el país, afecta a los empresarios y a los mismos colombianos que están radicados en los Estados Unidos. Para todo aquel que no entienda, Petro ya ganó todo y va por más. La pregunta sería: ¿Quién pierde con sus posturas incontrolables de medianoche?
A este conjunto de problemas se le debe agregar otra cosa, la seguridad; el principal aliado de Colombia en esta materia no es Venezuela, son los Estados Unidos, y cualquier restricción o desequilibrio afecta a todo el país, tema que ya surte efectos por falta de una política clara del gobierno, el rompimiento de relaciones con Israel y todo el fortalecimiento que no tiene la Fuerza Pública, tanto en materia de capacitación, intercambio de experiencia y recibo de recursos que mucha falta hace.
Para aquellos que deseen una explicación resumida, el ignorante de Petro actúa más por sus intenciones revolucionarias que por el pueblo de Colombia, arriesgando el todo por el todo de manera inteligente para mantenerse en el poder y seguir con las ideas donde inició su vida pública en el M19, pretendiendo posicionar e implantar el socialismo revolucionario y terrorista. Si esto no es terrorismo, entonces ¿qué es? Terrorismo: es todo aquello que cause intimidación o coerción de poblaciones.
“El camino puede ser difícil, pero con tu ayuda lo podemos lograr”. “Soy ciudadano”.
Carlos Enrique Martínez Caballero
Tolima7dias.com.co Sabe lo que dice
Advertencia: los comentarios escritos a continuación son responsabilidad única y exclusiva de su autor, y en nada compromete a este medio de comunicación digital
Los colombianos estarán divididos en sus posturas para calificar a Gustavo Petro bajo la pregunta: ¿inteligente o ignorante? Sus seguidores, los once millones que votaron por él, posiblemente dirán que es brillante, pero los cuarenta millones restantes creo que considerarán que es un bruto o ignorante.
Podrían decir que es inteligente, toda vez que su postura como gobernante en las redes sociales hacia los Estados Unidos desaprobando el ingreso de los aviones y los connacionales, desvió la atención y el ruido constante en los últimos días que le generaba la incontrolable situación del Catatumbo, los fallidos diálogos con el ELN, el desplazamiento masivo en Norte de Santander como resultado de los enfrentamientos entre el ELN y las FARC, además de la reunión entre los ministros de defensa de Colombia y Venezuela, el aumento de la gasolina y el tema de la conmoción interior.
Aprovechó para nombrar a uno de sus guardianes pretorianos, que es Laura Sarabia, como Canciller de Colombia, posicionándola aún más en el gobierno y dándole vía libre frente a la comunidad internacional, permitiéndole hacer “lobby” y multiplicar sus ideas e intenciones, sin importarle los cuestionamientos, críticas e investigaciones vigentes que ella tiene.
De paso Petro logró dos cosas: fortalecerse entre sus seguidores utilizando a Colombia, USA y los repatriados como puente de lanzamiento para ser noticia en todo el mundo, uniéndose al discurso antiimperialista y ganar adeptos del mundo que se identifican con las ideas socialistas, revolucionarias y comunistas.
Pero también revivir la posibilidad de una reelección frente a sus once millones de seguidores en votos, que ya están trabajando para que continúe en el poder o colocar a uno de sus peones en el 2026.
Por su parte, otros lo considerarán un bruto o ignorante, al poder en riesgo otra vez la estabilidad del país, no solo en el tema de la supuesta “paz total” que no llegará por el tema de la inseguridad, sino también por lo económico y social; eso por tratar de mostrarle los dientes a la primera potencia del mundo en un momento totalmente innecesario.
Él, como presidente y su gobierno, ya habían aceptado con el gobierno saliente de los Estados Unidos más de dieciséis mil repatriados en los mismos aviones y con las mismas características diplomáticas manifiestas, lo que significa que el tema no era del Estado colombiano, sino una postura personal del presidente Gustavo Petro.
Quien, a la llegada al poder, desestabilizó la economía y el dólar dio un golpe tremendo al país; la inversión extranjera descendió y los indicadores mostraron inestabilidad. Ahora, con esta acción, nuevamente, por una ignorancia bien administrada, se pone en vilo una temática que afecta a los colombianos y que se creía superada.
Es estúpido no medir las consecuencias de sus actos y más de su parte, el que es guerrillero, senador, político ahora presidente y “economista”. Sus actos afectan más al pueblo que a él mismo o al gobierno; afectan la imagen de Colombia, a todos los que lo eligieron pensando que administraría bien el país, afecta a los empresarios y a los mismos colombianos que están radicados en los Estados Unidos. Para todo aquel que no entienda, Petro ya ganó todo y va por más. La pregunta sería: ¿Quién pierde con sus posturas incontrolables de medianoche?
A este conjunto de problemas se le debe agregar otra cosa, la seguridad; el principal aliado de Colombia en esta materia no es Venezuela, son los Estados Unidos, y cualquier restricción o desequilibrio afecta a todo el país, tema que ya surte efectos por falta de una política clara del gobierno, el rompimiento de relaciones con Israel y todo el fortalecimiento que no tiene la Fuerza Pública, tanto en materia de capacitación, intercambio de experiencia y recibo de recursos que mucha falta hace.
Para aquellos que deseen una explicación resumida, el ignorante de Petro actúa más por sus intenciones revolucionarias que por el pueblo de Colombia, arriesgando el todo por el todo de manera inteligente para mantenerse en el poder y seguir con las ideas donde inició su vida pública en el M19, pretendiendo posicionar e implantar el socialismo revolucionario y terrorista. Si esto no es terrorismo, entonces ¿qué es? Terrorismo: es todo aquello que cause intimidación o coerción de poblaciones.
“El camino puede ser difícil, pero con tu ayuda lo podemos lograr”. “Soy ciudadano”.
Carlos Enrique Martínez Caballero
Tolima7dias.com.co Sabe lo que dice
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